VIVE. Revista
de Investigación en Salud
https://revistavive.org
Volumen 6 No. 16, enero-abril
2023
ISSN: 2664-3243
ISSN-L: 2664-3243
pp. 275 – 285
Terapia nutricional enteral y parenteral en pacientes con
diagnóstico de COVID-19 en UCI
Enteral and parenteral
nutritional therapy in patients with a diagnosis of COVID-19 in ICU
Terapia nutricional
enteral e parenteral em pacientes com diagnóstico de COVID-19 na UTI
María Elizabeth Yuquilima Campoverde
maria.yuquilima@est.ucacue.edu.ec
https://orcid.org/0000-0002-4500-3884
Jorge Luis Yánez Castro
jorge.yanez@est.ucacue.edu.ec
https://orcid.org/0000-0002-8554-2284
Víctor Xavier Yuquilima Campoverde
xavieryuquilimac@gmail.com
https://orcid.org/0000-0002-9346-9195
Universidad Católica de Cuenca. Cuenca, Ecuador
Artículo recibido el 22 de noviembre
2022 / Aceptado el 15 de diciembre 2023 / Publicado el 14 de
febrero 2023
Escanea en tu dispositivo móvil o revisa este artículo en:
https://doi.org/10.33996/revistavive.v6i16.225
RESUMEN
Se evidencia una gran cifra de casos de
enfermedad por el contagio de COVID-19, llamando la atención la desnutrición
que está asociada directamente con la exposición y estancia prolongada en
Unidad de Cuidados Intensivos, desencadenando a su paso un síndrome de mala
alimentación o desnutrición por Sarcopenia. Objetivo. Detallar los beneficios de la nutrición enteral y parenteral en un cuadro de
desnutrición en pacientes críticos con diagnóstico de COVID-19 en la Unidad de
Cuidados Intensivos, rescatando los beneficios en la evolución clínica del
paciente en términos de mortalidad y estancia hospitalaria. Metodología. Se realizó un estudio de revisión sistemática
sobre la nutrición enteral y parenteral en pacientes críticos con diagnóstico
de COVID-19, con enfoque de búsqueda de información en la base de datos como: PubMed, Lilacs, Scielo, Scopus, Web of Science. La
búsqueda comprendió desde el periodo 2020-2022. Conclusión. Los pacientes en estado crítico por infecciones de
COVID-19 están ligados a un estado grave de inflamación que se asocian con una
serie de procesos miopáticos agudos, precoces y
agresivos que desencadenan un mayor consumo calórico- proteico, menor
tolerancia a la terapia nutricional y por ende a la pérdida muscular. Se
determinó con esta investigación que la nutrición enteral y parenteral en
pacientes críticos con diagnóstico de COVID-19 desencadenan diversos beneficios
de carácter clínico al mejorar la ingesta nutricional, menor infección
nosocomial, menor mortalidad en unidad de cuidados intensivos y predisposición
a la mejora funcional disminuyendo la estancia hospitalaria y mejorando la evolución
clínica del paciente.
Palabras clave: Infecciones por Coronavirus;
Terapia Nutricional; Cuidados Críticos; Desnutrición
ABSTRACT
There is evidence of a large number of cases of
disease due to COVID-19 infection, drawing attention to the malnutrition that
is directly associated with exposure and prolonged stay in the Intensive Care
Unit, triggering a syndrome of malnutrition or malnutrition due to sarcopenia. Objective. To detail the benefits of
enteral and parenteral nutrition in a case of malnutrition in critically ill
patients diagnosed with COVID-19 in the Intensive Care Unit, highlighting the
benefits in the clinical evolution of the patient in terms of mortality and
hospital stay. Methodology.
A systematic review study was conducted on enteral and parenteral nutrition in
critically ill patients with diagnosis of COVID-19, with an information search
approach in databases such as: PubMed, Lilacs, Scielo,
Scopus, Web of Science. The search covered the period
2020-2022. Conclusion.
Critically ill patients with COVID-19 infections are linked to a severe state
of inflammation associated with a series of acute, early and aggressive myopathic processes that trigger a higher
caloric-protein consumption, lower tolerance to nutritional therapy and thus
muscle loss. It was determined with this research that enteral and parenteral
nutrition in critical patients diagnosed with COVID-19 trigger several clinical
benefits by improving nutritional intake, lower nosocomial infection, lower
mortality in the intensive care unit and predisposition to functional
improvement, reducing hospital stay and improving the clinical evolution of the
patient.
Key words: Coronavirus Infections; Nutrition Therapy; Critical Care; Malnutrition
RESUMO
Há evidências de um grande número de casos de doença devido à infecção
por COVID-19, chamando a atenção para a desnutrição que está diretamente
associada à exposição e à permanência prolongada na Unidade de Terapia
Intensiva, desencadeando uma síndrome de desnutrição ou desnutrição por sarcopenia. Objetivo.
Detalhar os benefícios da nutrição enteral e parenteral em um caso de
desnutrição em pacientes críticos diagnosticados com COVID-19 na Unidade de
Terapia Intensiva, destacando os benefícios na evolução clínica do paciente em
termos de mortalidade e permanência hospitalar. Metodologia. Foi realizado um estudo de revisão sistemática sobre
nutrição enteral e parenteral em pacientes graves com diagnóstico de COVID-19,
com foco na busca de informações em bases de dados como: PubMed, Lilacs, Scielo, Scopus, Web of Science. A pesquisa abrangeu o período de 2020 a 2022. Conclusão. Pacientes criticamente
enfermos com infecções por COVID-19 estão ligados a um estado grave de
inflamação associado a uma série de processos miopáticos
agudos, precoces e agressivos que desencadeiam maior consumo calórico-proteico,
menor tolerância à terapia nutricional e, portanto, perda muscular. Esta
pesquisa determinou que a nutrição enteral e parenteral em pacientes críticos
diagnosticados com COVID-19 desencadeia vários
benefícios clínicos, melhorando a ingestão nutricional, reduzindo a infecção nosocomial, reduzindo a mortalidade em unidades de terapia
intensiva e predispondo à melhora funcional, reduzindo a permanência hospitalar
e melhorando a evolução clínica do paciente.
Palavras-chave: Infecções por Coronavirus;
Terapia Nutricional; Cuidados Críticos; Desnutrição
INTRODUCCIÓN
La pandemia de
COVID-19 ha tenido un impacto significativo en la salud y la economía a nivel
mundial. La enfermedad ha afectado a millones de personas y ha causado una
cantidad significativa de muertes en todo el mundo. En particular, la COVID-19
ha llevado a muchos pacientes a la unidad de cuidados intensivos (UCI) con
complicaciones respiratorias graves (1). En este contexto, la nutrición
adecuada es fundamental para la recuperación y supervivencia de estos
pacientes. La terapia nutricional enteral y parenteral se utiliza comúnmente en
pacientes de UCI que no pueden comer por sí mismos debido a problemas
respiratorios graves (2,3).
La terapia
nutricional enteral implica la administración de alimentos y nutrientes a
través del tracto gastrointestinal, mientras que la terapia nutricional
parenteral se refiere a la administración de nutrientes a través de una vena.
La terapia nutricional enteral es la opción preferida en la mayoría de los
casos, ya que es más segura y menos invasiva que la terapia nutricional parenteral
(4). Además, la terapia nutricional enteral puede mejorar la función intestinal
y reducir el riesgo de infecciones relacionadas con la alimentación (5).
Sin embargo,
debido a la naturaleza altamente infecciosa del virus COVID-19, hay una serie de
desafíos para proporcionar terapia nutricional segura y efectiva a estos
pacientes (6). Los pacientes con COVID-19 en la UCI pueden tener dificultades
para respirar y pueden requerir ventilación mecánica, lo que puede dificultar
la administración de la terapia nutricional enteral. Además, algunos pacientes
pueden tener problemas gastrointestinales debido a la enfermedad, lo que puede
dificultar la absorción de nutrientes (7).
Por ende, para
proporcionar terapia nutricional segura y efectiva a los pacientes con COVID-19
en la UCI, se deben tomar en cuenta algunas consideraciones importantes. La
estabilidad hemodinámica del paciente, la capacidad para tolerar la
alimentación y el riesgo de aspiración antes de administrar la terapia
nutricional enteral (8). Además, se deben tomar medidas especiales para
prevenir la transmisión del virus durante la administración de la terapia
nutricional, como el uso de equipo de protección personal adecuado y la
implementación de medidas de higiene (9).
Los pacientes
hospitalizados con diagnóstico de COVID-19 muestran desnutrición
frecuentemente, justificado esto por la preexistencia de una patología crónica
sumado a esto un consumo nutricional deficiente, además de la pérdida por
asociación a los síntomas frecuentes de COVID-19, como alteración de gusto y
olfato además de las alteraciones gastrointestinales (10). Es importante
recordar que esta condición nutricional es de mayor riesgo para la población
>60 años que es la población de mayor riesgo para morbimortalidad. Además,
la desnutrición como antecedente, es un factor de riesgo en pacientes con
COVID-19, ya que afecta negativamente la clínica del paciente y aumenta la
mortalidad (11).
Por tanto, el objetivo de esta investigación es detallar los beneficios de la nutrición enteral y parenteral
en un cuadro de desnutrición en pacientes críticos con diagnóstico de COVID-19
en la Unidad de Cuidados Intensivos, rescatando los beneficios en la evolución
clínica del paciente en términos de mortalidad, donde, es importante proporcionar
una nutrición adecuada a los pacientes con COVID-19 en la UCI para ayudar en su
recuperación y aumentar la respuesta inmunitaria del paciente, reducir el
riesgo de complicaciones y mejorar la calidad de vida después de la
hospitalización.
METODOLOGÍA
Se realizó una
revisión sistemática usando buscadores en base de datos como: PubMed, Lilacs, Scielo, Scopus, Web of Science. Se inició
la búsqueda científica, con los Descriptores en Ciencias de la Salud (DeCs) y Medical Subject Headings (MeSH) Infecciones por
Coronavirus, Sarcopenia, Terapia Nutricional,
Cuidados Críticos, del mismo modo se realizó la combinación de estos, a través
de los operadores booleanos "AND", "OR" y "NOT"
en idiomas inglés, español y portugués, donde se utilizó el siguiente algoritmo
de búsqueda de información, ("COVID-19" OR "coronavirus")
AND ("nutrición enteral" OR "nutrición parenteral") AND
("UCI" OR "cuidados intensivos").
En cuanto a los
criterios de inclusión se tomaron en cuenta los siguientes factores, artículos
originales con temática de terapia nutricional en pacientes críticos con
COVID-19, artículos publicados durante los años correspondientes (enero 2020 -
diciembre 2022), revisiones bibliográficas y ensayos clínicos. Por su parte los
criterios de exclusión fueron, reporte de historias clínicas, revisiones
bibliográficas que no concuerden con el título y palabras claves en buscadores
bibliográficos, artículos pagados, estudios con población reducida y con edad ≤
18 años.
Para la
selección y sistematización de artículos se efectuó una interpretación e
indagación de cada artículo, luego de ello se realizó una matriz, en relación con los criterios de
inclusión y exclusión, donde se tuvo en cuenta la edad del paciente, sexo del
paciente, índice de masa corporal (IMC), estado nutricional previo del paciente
y comorbilidades presentes, como diabetes, enfermedad cardiovascular,
enfermedad renal, entre otras. La Figura 1 destaca el proceso de selección de
estudios de acuerdo a las recomendaciones de Preferred
Reporting Items for Systematic Reviews and Meta-Analyses-PRISMA.
Los artículos
encontrados luego de una búsqueda exhaustiva fueron un total de 56,
identificando 35 en la base de datos PubMed, y 21 en
Google Scholar. Con el empleo de los términos ya
mencionados y de la mano de operadores booleanos, la cantidad se redujo a 45,
eliminando 11 por duplicidad; se eliminaron 18 por resumen de artículo, de los
27 artículos restantes y del análisis realizado a cada uno de los artículos
arrojó 17 eliminados, empleando 10 para el análisis del estudio (Figura 1).
Figura 1. Diagrama de flujo que contempla la
identificación de estudios elegibles durante la búsqueda de información con
metodología PRISMA.
DESARROLLO Y DISCUSIÓN
Luego de aplicar los criterios de selección de las fuentes, se resume
los resultados obtenidos en la revisión sistemática. De esta manera fue
estructurada la información clasificando la terapia nutricional para la
reducción de mortalidad y estancia hospitalaria en pacientes críticos con
diagnóstico de COVID-19, cuyo propósito es de facilitar la lectura y
comprensión de los hallazgos de la investigación desde una perspectiva lógica y
coherente.
Inicialmente, los pacientes con diagnóstico de COVID-19 muestran
desnutrición frecuentemente justificado esto por la
preexistencia de una patología crónica y sumado a esto un consumo nutricional
deficiente, además de la pérdida nutricional por asociación a los síntomas
frecuentes de COVID-19, como alteración de gusto y olfato, además de las alteraciones
gastrointestinales (8,9). Es importante recordar que esta condición nutricional
es de mayor riesgo para la población >60 años que es la población de mayor
morbimortalidad (11). La determinación nutricional es importante dentro de las
primeras 24-48h, la guía ESPEN 2020 (12) manifiesta la importancia de conocer
antecedentes de alergia a alimentos, existencia previa de desnutrición (IMC
<18.5) o más bien de obesidad mórbida (IMC> 40), comorbilidades y
síndrome de realimentación en quienes recomienda nutrición parenteral (13).
Beneficios de la nutrición
enteral
El COVID-19, al ser una enfermedad inflamatoria y crónica predisponen a
que los pacientes presenten desnutrición, lo deseado sería continuar con
nutrición por vía oral en pacientes que se encuentran en terapia intensiva, sin
embargo, en aquellos que necesitan de ventilación mecánica, tanto la
hidratación y nutrición deben ser asistida para mejorar la recuperación (14).
La nutrición enteral puede darse a pacientes intubados y ventilados por medio
de sondas enterales como la sonda nasogástrica (SNG) según sea la necesidad del
paciente, mismo que puede ser utilizado en un máximo de 2-3 semanas y obligando
el comienzo inmediato de nutrición enteral (15,16). La alimentación enteral
puede ser por medio de bolos o continua, mismos que dependen de la gravedad de
cada paciente. Se recomienda que esta nutrición enteral sea continua en lugar
de bolo puesto que reduce la incidencia de diarrea (17).
Beneficios de la nutrición
parenteral
Hace referencia a la imposibilidad por parte del paciente para una
alimentación por vía oral o que la nutrición enteral no logra los objetivos,
diversas guías como la ESPEN y la ASPEN recomienda esta nutrición cuando se
presenta un paciente en estado crítico, sin embargo, no existe una evidencia
que demuestre el momento preciso (18). Esta nutrición debe dar inicio el día
3-7 del ingreso si la nutrición enteral no está dando eficacia, es importante
tomar en cuenta nutrientes: glucosa, lípidos, aminoácidos. Esto siempre y
cuando no existan contraindicaciones como la presencia de triglicéridos >400
(19).
Tabla 1. Matriz de terapia nutricional para la reducción
de mortalidad y estancia hospitalaria en pacientes críticos con diagnóstico de
COVID-19.
Autor/Año |
Título |
Estudio |
Resultados |
Lin J, et al. (20) / 2021 |
Práctica
nutricional en pacientes críticos con COVID-19: un estudio de cohorte ambidireccional multicéntrico
en Wuhan y Jingzhou |
Estudio de cohorte
bidireccional multicéntrico |
La prescripción
precoz de NP podría no ser útil, ya que el desarrollo endógeno de sustrato
energético en relación con el estrés puede ser intensa
durante los primeros días, además la administración precoz y exuberante de
glucosa se correlaciona con un aumento de la morbilidad. |
Taylor B, et al. (21) / 2022 |
Efecto del soporte nutricional temprano
sobre la duración de la estancia, la mortalidad y la extubación
en pacientes con COVID-19 |
Estudio observacional retrospectivo |
|
Compher C, et al. (22) / 2022 |
Directrices para la
provisión de terapia de apoyo nutricional en pacientes adultos en estado
crítico: Sociedad Estadounidense de Nutrición Parenteral y Enteral |
Estudio de revisión
sistémica |
No existió una
diferencia significativa en los resultados clínicos entre la NP exclusiva
temprana y la NE durante la primera semana de la enfermedad crítica. |
Lewis S, et al. (23) / 2018 |
Nutrición enteral
versus parenteral y enteral versus una combinación de nutrición enteral y
parenteral para adultos en la unidad de cuidados intensivos |
Estudio de revisión sistémica |
La NE disminuye el riesgo para sepsis (IC
95 %: 0,37-0,95) sin embargo para NP no está muy clara puesto que su
porcentaje es bajo. |
Alsharif D, et al. (24) / 2020 |
Efecto de la nutrición parenteral suplementaria frente a la nutrición
enteral sola en los resultados clínicos de pacientes adultos en estado
crítico: revisión sistemática y metanálisis de
ensayos controlados aleatorios |
Revisión
sistemática y metaanálisis |
Cuando la NE no
cumple con los requisitos de energía en pacientes en estado crítico, se podría
considerar la NP ya que ayuda a aumentar la ingesta de energía y proteínas y
disminuir las infecciones nosocomiales y la mortalidad en la UCI. Para
obtener los máximos beneficios de la NP, debe retrasarse hasta al menos el
día cuatro después del inicio de la NE para permitir que la NE progrese lo
suficiente y disminuya la cantidad de NP necesaria. |
Reignier J, et al. (25) / 2018 |
Nutrición
temprana enteral versus parenteral en adultos ventilados con shock: un
estudio aleatorizado, controlado, multicéntrico,
abierto, de grupos paralelos (NUTRIREA-2) |
Estudio aleatorizado,
controlado, multicéntrico, abierto, de grupos
paralelos |
Las proporciones de
pacientes con vómitos y terapia con fármacos procinéticos
gástricos fueron mayores en el NE que NP, aunque la ingesta calórica diaria
estuvo cerca de las 20 kcal/kg objetivo por día en ambos grupos. En
comparación con NE la NP tenía mayor cantidad de calorías e ingesta de
proteínas, menor frecuencia de hipoglucemias y una mayor frecuencia de
normalización del lactato en sangre. |
Wu S, et al. (26) /2021 |
La nutrición enteral temprana mejora el
resultado de los pacientes críticos con COVID-19: un estudio retrospectivo |
Estudio
retrospectivo |
No
existe diferencia significativa para NE y NP (p=0,078). Sin embargo, en
términos de ingesta proteica diaria, la del grupo NE (55,6±9,5g) fue muy
superior al grupo NP (37,2±12,7g) (p<0,001). Los niveles de albúmina son
mayores en el grupo NE que en el NP grupo, y hubo una diferencia
significativa (p=0,030). La mortalidad a los 28 días del grupo NE fue del
50%, mientras que el del grupo NP fue del 76,9%. |
Osuna
I, et al. (27) / 2021 |
Seguridad y tolerancia de la nutrición
enteral en pacientes críticos con COVID-19, un estudio retrospectivo |
Estudio de cohorte
retrospectiva |
El 90 %
de enfermos con NE alcanzaron >80 % de sus requisitos objetivo en el día 7
(22,8 ± 7,3 kcal/kg), lo que ayuda a descartar las preocupaciones clínicas
comunes con respecto a la intolerancia GI en estos pacientes. |
Martindale R, et al. (28) /2020 |
Terapia nutricional en pacientes críticos con enfermedad por
coronavirus 2019 |
Revisión
sistemática y metaanálisis |
La Terapia nutricional beneficia con nutrientes luminales
a la mucosa intestinal, inclusive permite llegar a los objetivos de proteína
y energía durante la primera semana. |
Pazos C, et al. (29) / 2019 |
Malnutrición
en el paciente crítico, una mirada desde la ciencia, tecnología y sociedad. |
Revisión descriptiva, no
experimental |
La terapia nutricional
favorece la clínica de pacientes desnutridos en UCI de acuerdo a las demandas
de cada paciente, reduce los tiempos de ventilación mecánica, la sepsis y el
retardo de la cicatrización disminuyan de manera sustancial. Reduce indirectamente la
tasa de mortalidad en estas unidades y se logra una rápida recuperación del
paciente. |
|
La terapia
nutricional enteral y parenteral en pacientes con diagnóstico de COVID-19 en
UCI es un factor determinante en la recuperación del paciente y las posibles
complicaciones a futuro, por lo tanto, esta investigación logró identificar el
impacto de las comorbilidades en las características clínicas que influyen en
el pronóstico de pacientes críticos con diagnóstico de COVID-19 (18). Los
antecedentes de comorbilidad endocrinológica y circulatoria fueron frecuentes
en pacientes con COVID-19. Pacientes con al menos una comorbilidad, influyen en
factores de peor pronóstico clínico. En cuanto a los beneficios de terapia
nutricional se relacionan ampliamente con cambios en el metabolismo de los
pacientes críticos, además de ello reduce daños oxidativos a nivel celular y
mejora la respuesta inmune (18,19).
En cuanto, a
las comorbilidades de mayor frecuencia fueron las de patologías circulatorias
como hipertensión y enfermedades coronarias, independientemente de las
enfermedades circulatorias, las enfermedades endocrinológicas como diabetes
fueron las segundas en frecuencia para pacientes con COVID-19 (20). Diversas
revisiones bibliográficas identificaron mayor riesgo de efectos clínicos
negativos en pacientes infectados con SARS- CoV y
Síndrome respiratorio de oriente medio (MERS) (21,22). Los antecedentes de comorbilidad
de mayor relación con factores de mal pronóstico son; hipertensión, diabetes,
enfermedades cardiovasculares, enfermedades pulmonares, enfermedades
cerebrovasculares, neoplasias malignas, hipercolesterolemia y enfermedad renal
crónica (23). Sin embargo, con respecto a esta última patología y según
estudios recientes identificaron que la relación es muy baja entre malignidad y
mortalidad (24).
Por otra parte,
la terapia nutricional es un tratamiento primordial para SDRA, el inicio de la
nutrición temprana dentro de los 2-3 primeros días beneficia la clínica del
paciente reduciendo la permeabilidad gastrointestinal, disminuye la activación
y descarga de citocinas inflamatorias, reduce la
infección mejorando el cuadro clínico del paciente, por tanto, reduce la
estancia hospitalaria y la mortalidad. Además, cubre las necesidades de
macronutrientes, evita efectos adversos del metabolismo frente a la patología,
disminuye el daño oxidativo celular y regulariza la respuesta inmunitaria (25,26).
La utilización
de algunos suplementos como leucina o Betahidroximetilbutirato
(HMB) podrían ser de gran ayuda para mantener o mejorar la recuperación, de
acuerdo a un estudio, la utilización de suplementos en pacientes con
comorbilidades cardiorrespiratorias redujo la mortalidad a 90 días, frente al
placebo (p=0,018) (26). Corroborando a esto las guías de la ESPEN recomiendan
el mantenimiento de suplementos por al menos un mes (26,27).
Gran parte de
enfermos críticos con diagnóstico de COVID-19 presentan una alta amenaza
nutricional con una predisposición del 43% y 49% (28). Según el trabajo de investigación
realizado por Pazos et al. (29), la nutrición enteral enriquecida mejora el
efecto de pacientes ingresados en UCI con ventilación mecánica, demostrando
menos días de ventilación, con reducción de estancia en UCI. La nutrición
enteral (NE) es la nutrición de mayor preferencia siempre y cuando los
pacientes presenten una buena función intestinal (30).
Según autores
recomiendan la administración de 20-25kcal/kg de nutrición enteral durante la
fase aguda de pacientes críticos (31). Sin embargo, el inicio precoz de NE
podría desencadenar alteraciones gastrointestinales, vómitos en más del 50% de
pacientes y en pacientes con shock podría desarrollarse isquemia intestinal (32).
En un estudio realizado por Zhang et. al. (33) cerca
del 80% de la población recibió NE y cerca del 10% recibió NP debido a las
contraindicaciones para NE, ya sea al shock o por hemorragia gastrointestinal.
Por su parte, en un trabajo desarrollado por Lewis et al. (23) no evidencio
diferenciación en la combinación con NE y NP en relación a la mortalidad a los
90 y 180 días, pero sí reducción de la mortalidad a los 30 días.
CONCLUSIÓN
Los pacientes
en estado crítico por COVID-19 están ligados a un estado grave de inflamación
que se asocia con una serie de procesos miopáticos
agudos precoces y agresivos que desencadenan, mayor consumo calórico- proteico,
menor tolerancia a la terapia nutricional y por ende a la pérdida muscular. La
desnutrición es una pieza clave en el manejo y estado inflamatorio de pacientes
en UCI con diagnóstico de COVID-19, puesto que condiciona no solamente un
factor de mal pronóstico, sino también mayor estancia hospitalaria, aumento de
la tasa de infecciones, ventilación mecánica prolongada y mortalidad.
Para el manejo
de la desnutrición es necesario emplear un tratamiento nutricional que inicie
de manera precoz con aporte hiperproteico e
hipocalórico, en aquellos que no llegan al objetivo nutricional como primera
opción se recomienda utilizar suplementos nutricionales orales, si la
problemática continua se prefiere la utilización de NE a 15-20kcal/kg/día
tratando de cumplir el objetivo de 20-30% en la primera semana de estancia en
UCI y si esta falla la opción más factible es la NP sobre todo para aquellos
con shock séptico puesto que ayudará a reducir el riesgo de intestino
isquémico. La nutrición enteral es el tratamiento nutricional de elección para
pacientes desnutridos en UCI inclusive en aquellos que están en decúbito prono,
al ser mucho más segura y al beneficiar a los pacientes con una respuesta
favorable de la mucosa intestinal con nutrientes luminales.
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CONFLICTO DE INTERESES. Los autores declaran que no existe conflicto de intereses para la
publicación del presente artículo científico.
FINANCIAMIENTO. Los autores declaran que no se recibió financiamiento.
AGRADECIMIENTOS. Ninguno manifestado por los autores